En primer lugar, decir que me encantó Toulouse, es una ciudad con encanto y en la que muchísima gente habla español. Estuve la última semana de enero de 2020.
Empezaré hablando del lycèe, ya que es lo primero que vi. Cuenta con varios edificios y se imparten enseñanzas de Formación Profesional y Bachillerato , tiene residencia para estudiantes y un comedor. El horario para los alumnos de Formación Profesional es de 8:00 a 17:30, de lunes a viernes.
Mi estancia me pilló el tiempo de revueltas, ya que los profesores estaban en huelga por la modificación de la Ley de Educación y la de Jubilación , así que, asistí a alguna reunión y me puse al día de sus reivindicaciones, ¡interesante!
Respecto al job shadowing propiamente, estuve en las clases de español, transporte internacional, economía, negociación, management y ofimática, además de asistir a una videoconferencia con el encargado de la cámara de Comercio de Francia en Alemania, en la que planificaron el viaje que los estudiantes de Comercio Internacional iban a realizar, con motivo del proyecto de prospección que lleva el centro con los alumnos del citado ciclo.
También asistí a varias sesiones de orientación sobre las opciones de los alumnos tras sus estudios en el lycèe. Lo que pude observar es que se trabaja de una forma muy práctica, en las clases que estuve, ninguno de los profesores utilizaban libros de texto y fundamentalmente, se analizan artículos de prensa y páginas web.
Me gustó el perfil del alumnado, en general eran trabajadores y mostraban interés en las clases. Lo que más me llamó la atención fue lo bien que hablaban español.
El último día y con ocasión de mi despedida, fuimos a comer, el director del lycèe, la responsable de Erasmus y parte del equipo educativo del ciclo de Comercio Internacional, en la que hicimos una valoración de mi estancia. El balance: ha sido una experiencia muy enriquecedora tanto a nivel profesional como personal.
Amaya Rodríguez